El efecto Pinocho
Siempre que Pinocho mentía que le crecía su nariz de madera. Un gran inconveniente si tenía esa mala costumbre. Aunque sea casi imposible darnos cuenta, también sucede en el ser humano y hay una relación entre nuestra nariz y las mentiras.Nuestra nariz no crecerá si mentimos mucho por el paso de los años, lo que ocurre es que al momento de mentir se libera ‘catecolaminas’ que provocan la inflamación de algunos tejidos del cuerpo, por lo que este efecto es sólo temporal.
A estas consecuencias a la mentira se les llama efecto Pinocho en recuerdo al personaje: Hace que la presión sanguínea aumente, afectando también a la nariz. Por esto algunos mentirosos suelen frotarse la nariz para calmar el picor.
Este efecto ha sido certificado por la Fundación para el tratamiento y la investigación del gusto y el tacto en Chicago.